Desfile de la Cofradía Militar del Carmen
Tiene su origen en el primer Cabildo de Caballeros, creado por el primer señor de Molina, D. Manrique de Lara, en el siglo XII. Doña Blanca, última señora del Señorío de Molina, procedió a su reorganización pasando a denominarse Compañía de Caballeros de Doña Blanca y llegando a constar de cien caballeros que corrían a cargo de la defensa del Común de Villa y Tierra y el Montazgo de Molina.
Con posterioridad formaron la que hoy conocemos como la Cofradía Militar del Carmen, que consta de cerca de medio centenar de caballeros: coronel en jefe, teniente coronel, comandante, capital, teniente abanderado, alférez con estandarte, un cabo -al que sigue una escuadra de gastadores y la banda de trompetas y tambores. Visten uniforme militar blanco y rojo, y, como armas, picas o alabardas.
El 15 de julio tiene lugar el desfile procesional de la Cofradía, con su Compañía Militar uniformada, para trasladar el Estandarte al palacio del Ayuntamiento, en cuya galería, que da vista a la Plaza Mayor, queda expuesto a la veneración del pueblo y en donde dos albarderos le rinden guardia de honor, con relevos cada media hora, hasta las doce de la noche.
A esa hora, se ilumina la plaza con la quema de una colección de fuegos artificiales, y el Estandarte se traslada de nuevo procesionalmente a la Iglesia de San Gil, donde se canta la Salve a la Virgen. Año tras año, en la mañana del 16 de julio y tras la Santa Misa, los molineses llevan a cabo el tradicional culto a esta Virgen, haciendo de ella “su Señora”, en una procesión que recorre las calles del municipio, en la que su guardia de honor, la compañía militar, cofrades y autoridades escoltan la imagen con la máxima veneración, poniendo color, sonido y alegría a la noble ciudad. Esta procesión es conocida popularmente como la de los “cangrejos”, por el color rojo de las vestimentas.
Por la tarde, tras el acto del fin del novenario, en magna procesión es trasladada la Virgen a su ermita. Por último desfilan los cofrades para escoltar a la bandera, hasta la casa del Coronel Jefe.