Gastronomía en Guadalajara
Guadalajara tiene ante todo una diversidad de climas y entornos geográficos que se traslada a la mesa y las despensas con una gran variedad de productos y recetas que permiten al visitante durante todo el año disfrutar de este manjar.
Nuestra provincia cuenta con dos chefs Estrellas Michelín en Sigüenza (Samuel Moreno y Enrique Pérez), que junto al resto de restaurantes ofrecen una calidad de platos al visitante en cada uno de los municipios de la provincia.
Guadalajara cuenta con una gran riqueza y variedad de la gastronomía, no suficientemente conocida, pero sí admirada y muy valorada por quienes han tenido el privilegio de degustarla: la diversidad de culturas que se han asentado a lo largo de los siglos en estas tierras, dejando cada una de ellas su herencia gastronómica, y la personalidad geográfica diferenciada de las comarcas de la provincia, factor que implica, por una parte, variedad en los productos agroalimentarios típicos de unas comarcas respecto a otras y diversidad en la forma de tratarlos en la cocina.
Así, en la Campiña, se producen y forman parte de la base gastronómica de esta comarca: espárragos, hortalizas, cereales y gracias a los nuevos regadíos maiz.
En el apartado cárnico, en esta comarca abundan los rebaños de ovino, por lo que el cordero, en sus diversos tratamientos culinarios -especialmente asado o en caldereta-, se convierte en elemento imprescindible en un buen menú campiñero. Aves de granja y huevos frescos producidos en esta comarca gozan de excelente reputación en el mercado nacional.
En las Serranías, aprovechando los ricos y variados pastos que abundan en las dehesas y sotos de esta comarca, se produce carne de vacuno, caprino y ovino de primera calidad. Chuletones y solomillos de vacuno, cabrito y cordero asado, en caldereta o en "cuchifrito", son platos reyes en esta amplia comarca, en la que, en otoño, son apreciadísimas las setas de cardo, los níscalos y los boletos edulis que en ella se producen espontáneamente.
En el Señorío de Molina, la carne de caprino y ovino es la base de su gastronomía, con un variado y exquisito tratamiento en la cocina. Molina es también tierra generosísima en la producción espontánea de níscalos y otras variedades de hongos, incluso la trufa negra (tuber melanosporum). La judía -allí llamada "bolo"- es la reina de un buen primer plato molinés. Conejos de granja de apreciado sabor producidos en el Señorío de Molina llegan diariamente a los mercados nacionales que más demandan este producto.
En las Alcarrias se compendia la mayor parte de la gastronomía del resto de la provincia: hortalizas, verduras y carnes -especialmente de ovino-, forman parte de la base culinaria de esta comarca.
Y recordar que la Miel de la Alcarria, tanto en postre como en ingrediente de imaginativas recetas de segundos platos o como base de licores, es la única producida en España que goza de "Denominación de Orígen" por su extraordinaria y reconocida calidad.
A lo largo y ancho de toda la provincia, con el tratamiento particular en la cocina propio de cada comarca, son recomendables platos como: Sopas de Ajo, Migas, Gachas, Judías, Morteruelo -especialmente en el Señorío de Molina-, Caracoles, Cerdo en matanza, Trucha, Corzo -especialmente en las Serranías-, Jabalí, Conejo, Liebre, Perdiz, Codorniz, etc.
La repostería en Guadalajara goza de reconocido prestigio, girando gran parte de ella en torno a la miel: Alajú, Arrope, Hidromiel,etc…
También son exquisitos postres guadalajareños los "Bizcochos Borrachos" -especialmente en la capital y en Tendilla-, las "Patas de Vaca" -en Molina de Aragón-, los "Crispines" -en Budia-, las Tortas y Rosquillas -especialmente en Brihuega-, las Pastas y Bollos de Sigüenza, etc.
Para acompañar en la mesa, excelente es el "Vino de Mondéjar", que justamente goza de "Denominación de Orígen".